Caprica |
Rincón donde hablo sobre las cosas que me interesan: tecnología, ciencia, software libre, ciencia ficción, fantasía y frikadas varias. |
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La belleza del conocimientoA todos nos ha atraído alguna historia sobre un viejo castillo abandonado, algun cuento popular que es delatado por un pequeño monumento o historias que nos llegan del lejano oriente sobre criaturas singulares y mágicos emperadores. ¿Y quién no se ha sentido cautivado por relatos sobre dioses griegos, vampiros o fantasmas?Pero dichas fantasías no resisten mucho la mirada de la razón, de la visión de un mundo gobernado por leyes físicas inmutables y sin que ese deleteite que nos proporciona el mundo de lo desconocido, la imaginación, se apague. Aún dejando de lado esta admiración, hay algo que nunca dejará de maravillarme por la realidad que se esconde detrás, y es el cosmos. Podemos maravillarnos al contemplar el cielo estrellado en una noche de verano, es algo abrumador, mágico, bello. Algunos sienten como en un cielo despejado la Luna llena parece bañarnos de luz. Observar las errantes, cómo los pequellos puntos parpadeantes parece que se organiza en pequñas estructuras máginas como un escorpión, una osa o un arquero, no puede dejar ninguno indiferente. Esa imagen está suavemente cubierta por un velo, el manto de la ignorancia nos fascina. Pero cuando yo alzo la vista el cielo, conozco que los llamados errante son otras esferas, no perfectas, algunas parecidas a la Tierra, otras completamente diferentes. Contemplo la Luna, sé cuál es su pasado, el choque de los cometas, y puedo conocer su futuro. Vislumbro la vía láctea, sé que cada uno de esos puntos, son estrellas, se encuentra a distancias que mi mente no es capaz de concebir. Y sé, que esas estrellas, como nuestro Sol, se consumen con una violencia inimaginable desde dentro, y debido a esa voraz reacción algún día, muy lejano, se apagarán. Puedo maravillarme con los desiertos de martes, entender por qué se han formado los anillos de Saturno o estudiar la atmósfera de Venus. Examino las nebúlosas, como la del Águila, y entiendo que está formada por gas y polvo, y son la cuna de las estrellas. No puedo expresar el regocijo que siento al observar con los ojos del que conoce. Todo ese conocimiento embellece el cielo de una forma que ninguna leyenda puede igualar. 2009-10-17 19:53 | | 3 Comentarios | Enlace permanente
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